Mi mundo burbuja y los que están dentro de él...

domingo, 1 de abril de 2012

Así fue, así es, a veces.

No siempre fui así. Recuerdo un tiempo en el que sólo era a veces. Sólo, cuando tu estabas.

Caminar sola y respirar la primavera, se convertía los lunes, al despertar, en mi afición preferida. A veces, era invierno y llovía sobre mi cabeza. No importaba, a veces esos días eran mi preferidos. A veces. Casi nunca.

Los años pasan, la vida fluye y nos separa. A veces felices, otras nostálgicos. A veces, pensando en cambiarnos de religión, de país...a veces, por encontrarnos.

Hubo una época en la que el sol no salía, y vestía los días de un luto intenso. Siempre pensé que no te velaba a ti. Y acostumbre a vivir despacio. Deprisa, sólo a veces.

Me refugié en el mar eterno, durante horas eternas. Y cuando el amanecer se terciaba rosado, buscaba la mirada cómplice de una ola rota. Aquella, que sólo daba la cara una vez, dos veces, a veces...

Me doy un abrazo por aquellas noches al llegar a casa imaginándote escondido en algún lado. En el lado opuesto de mi almohada. Concretamente en otro hemisferio, bajo otro cielo. Recordándome, a veces.

Por la taza  de café helado, rompiéndose contra una pared mojada. A veces, no del café.

Por mis sueños cumplidos y mis guerras ganadas.

Porque todo es relativo. Porque todo no eres tu. A veces.

5 comentarios:

  1. Entonces, ¿cuándo nos hacemos budistas y huimos tú y yo a Nueva Zelanda? ¿Qué vez?

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  2. Qué bonito, me gusta mucho leerte.

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  3. Dado que no soy de planear demasiado, coge la maleta y vayámonos,ésta vez. jajaja

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  4. Gracias anónimo por tu tiempo.

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  5. A veces no siempre.
    A veces, no siempre.
    A veces no, siempre.

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